Loren siempre con nosotros


El pasado 9 de julio, sobre la cima del pico Aspe, a 2645 metros de altitud, el sonido de una armónica, se abrazo al viento y voló más allá del cielo, para llevar un mensaje de cariño y de recuerdo a nuestro añorado amigo y compañero Lorenzo Sierra.

La jornada comenzó con el encuentro de los montañeros y montañeras del Club Litera en el aparcamiento de las pistas de Candanchú, donde se inició la ascensión al pico Aspe una bonita y emblemática montaña del Valle del Aragón. Los primeros tramos de esta ruta discurren por las pistas de esquí y resultan bastante ásperos hasta alcanzar el Paso de Tortiéllas, desde donde ya podemos ver nuestro objetivo, la cara norte del Pico Aspe que parece inexpugnable .Desde este punto vamos ganando altura de manera más amable, disfrutando del impresionante paisaje que forman los acantilados del Aspe y sus vecinos Lecherin,  y Sombrero desplomándose sobre el barranco de .Tortiéllas. Un destrepe protegido por una sirga, nos acerca a un pequeño ibón rodeado de verdes pastos, creando una bucólica imagen que no pasa desapercibida para las cámaras de los montañeros del Club Litera. Alcanzadas las faldas de la cara norte del Aspe, la subida cobra sabor alpino y trepa con poco descanso en busca de la cima. Vamos ganando metros a la montaña saboreando el impresionante paisaje  que se va ampliando,  a medida que cogemos mayor altura y en el que destaca la majestuosa silueta de la montaña más bonita del Pirineo, el Midí D´Ossau. Una canal casi vertical nos separa del collado que da acceso a la cima , por suerte los hitos nos van guiando por hacia la izquierda, por terreno más cómodo y seguro , para dejarnos en su tramo final en el embudo de piedra suelta por el que accedemos al  collado y desde el que ya sin dificultad alcanzaremos la ansiada cima.

Reunidos amigos y familiares de Loren, compartimos emociones y sentimientos, y desde esta atalaya privilegiada le enviamos un abrazo muy grande a nuestro amigo, que permanece muy vivo en el recuerdo de quienes compartimos tantos y tan buenos momentos con El en la vida y en la montaña.

El descenso se realizo con la calma que requieren, la exposición y dificultad del recorrido y ya con un nuevo objetivo en el horizonte, la bien ganada cerveza compartida con todos los participantes, disfrutando del buen ambiente del grupo montañero.