Después de tantear distintas opciones en función del número de participantes nos decantamos por realizar la salida de raquetas en el Valle de Benasque, un lugar al que nunca nos cansaremos de ir.
Además, esta fue la primera ocasión en que algunos de los participantes tomaron contacto con esta modalidad de senderismo invernal, y no les defraudó.
Tras el madrugón obligado por el cambio de hora, los senderistas partieron del parking de los Llanos del Hospital sobre las 10:30, pero muy pronto se calzaron las raquetas. La escasa nieve presente en la pradera les hizo quitarlas hasta llegar a las pistas de esquí de fondo
Ahora sí, con la nieve suficiente, un día soleado y una temperatura agradable, los literanos comenzaron a disfrutar de este precioso valle, siempre vigilados por la silueta del Salvaguardia. Después de recorrer los primeros kilómetros por una suave subida hasta el plan d’Están, los raquetistas decidieron ascender por el GR11, ahora una ladera cubierta de nieve, para alcanzar la Besurta. Desde allí otra suave pendiente hasta alcanzar el indicador que separa los senderos hacia el refugio de la Renclusa y el Forau d’Aigualluts, lugar al que les hubiese gustado llegar, pero después de las fotos de rigor el tiempo se les echó encima y decidieron volver a la Besurta para reponer fuerzas.
Ya en bajada y por las pistas de esquí de fondo solo les quedaba disfrutar del paisaje y ver como los atrevidos esquiadores de travesía se deslizaban por las laderas debajo del pico Paderna
Quizás ya no quede tiempo este año debido a lo avanzado de la temporada y la escasa cantidad de nieve, pero seguro que muchos de ellos hayan tomado nota y vuelvan al año que viene a disfrutar de la nieve en buena compañía.