El domingo 20 de enero hubo que buscar un lugar a resguardo para practicar la escalada deportiva. El viento y el ambiente desapacible no hacían nada apetecible realizar al actividad al aire libre. Así pues, ¿dónde mejor que en rocródromo de Alquézar?. Seis miembros del Club Litera llegaron al rócódromo a las 10:00 y dispusieron de la instalación para ellos solos durante toda la jornada. Cuando el cansancio comenzó a hacer mella en los los brazos de los escaladores, decidieron alternar la escalada con la práctica a ras de suelo de otras técnicas útiles durante la actividad. Cansados y satisfechos, esperarán ansiosos a mejores condiciones meteorológicas para volver a la roca natural.