El sábado 20 de Agosto, un grupo de siete miembros del club se desplazaron hasta Broto para realizar la Ferrata del Sorrosal. Tras reunirse en la localidad pirenaica se dirigieron al pie de la cascada del Sorrosal donde, resguardados del sol, comenzaron la vía. Luego de superar escalones, cadenas, clavijas y escaleras alcanzaron el agujero excavado por las gentes del lugar para desviar agua del barranco hacia sus cultivos. La vía discurre por su interior para dirigir a los ferraterros a la cabecera de la cascada. Una vez allí, se continúa por el barranco, cambiando de orilla pasando por un madero a modo de puente. En esta parte conviven con los barranquistas. Se sigue subiendo y subiendo, ya dejando el barranco, hasta alcanzar el final de la vía. Una ferrata bonita y espectacular, aunque el día quizá haya sido demasiado caluroso. Antes de despedirse, los participantes compartieron mesa en Broto, para reponer fuerzas. ¡Animáos a venir a las ferratas!.
